El almacenaje para paneles solares en España está ganando cada día más auge. Esto se debe al océano azul de posibilidades que se derivan de la derogación del impuesto al sol. Como informaron todos los medios de referencias y las agencias internacionales de noticias, el pasado 5 de octubre, el Gobierno derogó el “impuesto al sol”, que entorpecía el crecimiento del sector de la energía solar fotovoltaica y del autoconsumo eléctrico a nivel ancional.
El autoconsumo ve la luz
Javiér Jiménez, columnista de Xataca, detalla gran cantidad de beneficios:
- Se ha prohibido “establecer cargos o peajes a toda energía renovable que vaya a ser autoconsumida”.
- Las instalaciones de autoconsumo ganarán popularidad. Ya que “la sanción nunca podrá superar el 10% de la factura anual del consumidor”.
- Las instalaciones domésticas quedan exentas de “pedir permiso a las compañías eléctricas para conectarse”.
- Se instaura el derecho al autoconsumo compartido, los cual es clave ya que “el 66,5% de los españoles vive en bloques de pisos”. Para ilustrarlo solo es necesario explicar que: En España solo existe un millar de autoconsumidores. En cambio, en Alemania cuentan con más de un millón.
Energías renovables “made in Spain”
Según El Confidencial, la potencia eléctrica registrada en instalaciones de autoconsumo en España llega a 1.196 megavatios (MW), de los cuales 170 MW corresponden a instalaciones de fuentes de energía renovables.
Lógicamente, el almacenaje para paneles solares en España se ha visto potenciado. Ya que en la búsqueda de una mayor independencia energética está ganando cada vez más adeptos, en especial cuando se considera el elevado precio del recibo de la luz.
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